Monica Bellucci, la diva que a sus 52 años ha logrado derribar las barreras de la industria que ven a la mujer como un símbolo sexual. Fue madre primeriza a una edad poco usual; a su hija Deva la tuvo a los 40 años y a Leonie a los 45.
Su familia fue prioridad antes que su carrera, sin embargo esto no hizo romper su presencia en el cine. Bellucci se convirtió en chica 007 cuando cumplió sus cincuenta años.
Monica Bellucci y las desigualdades de género
Mónica reconoce las tremendas desigualdades de género que existen en el mundo del cine. En el Festival de Cannes le tocó ser maestra de ceremonias y entre sus comentarios dijo:
“Claramente hacen falta más directoras. Yo he participado en 55 cintas y solo me han dirigido mujeres en cinco de ellas. Este mundo sigue siendo de los hombres, aunque haya realizadores como Almodóvar que hagan películas a mayor gloria nuestra”.
Esta mujer de presencia intimidante en su apariencia pero muy dulce de trato. Su actitud imponente la han comparado con las mammas del cine italiano; entre ellas: Sophia Loren, Anna Magnani, Claudia Cardinale. También del cine francés como Jeanne Moreau, Brigitte Bardot.
De cada una de esas mujeres ha tomado la belleza, la sensualidad y el misterio. Se pregunta por qué después de tanto tiempo trabajando en la industria del cine no forma parte de alguna familia del medio. De lo anterior comenta:
“Aunque soy italiana y he filmado películas en Italia, no formo parte de la escena de allí. Vivo en Francia y, a pesar de que he hecho cintas francesas, no pertenezco al cine francés. Lo mismo me pasa con Hollywood: he trabajado en Estados Unidos, pero no formo parte de su star system. Si me paro a pensarlo, la verdad es que mi trayectoria es muy rara”.
Lo que sí se sabe de esta legendaria actriz es que su carácter es tan especial que no sólo pertenece a una familia del cine sino a todas.
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