Hace uno días se dio la noticia de que Melania Trump y el pequeño Barron no estarían viviendo por ahora en la Casa Blanca. La razón de ello es que el hijo menor del Presidente electo de los Estados Unidos, con 10 años, debe concluir el colegio y está censado en un exclusivo centro de Nueva York. Fue una decisión algo controvertida, en realidad, a muchos neoyorquinos no les agradó la noticia.
Fue hasta que llegó el punto de que inclusive se habrían tomado ya más de 100.00 firmas solicitando que Melania y su hijo dejen la ciudad. La razón de ello, más que ideológico, era el factor económico. Es que el cuidar cada medida de seguridad en la Trump Tower, en la cual moran, a la ciudad le cuesta la suma total de 1 millón de dólares por día. Millón el cual sale de forma directa de los impuestos de cada contribuyente.
“Cada uno de los contribuyentes de la ciudad de Nueva York se niega a pagar más de 1 millón de dólares al día para que se pueda quedar. Si se trata de una decisión la cual se pudiese tomar, ellos (refiriéndose a los Trump) tuviesen que ser los encargados de pagar. No el dinero de los ciudadanos de nueva York que lograría ser empleado para las carreteras, escuelas, el tráfico, el ámbito de sanidad, nuevos trabajos y otros gatos que carga la ciudad”, dice el texto de la recogida.
Esas personas están empadronadas en Nueva York, esencialmente en Manhattan, donde pagan grandes impuestos todos los meses. De allí que resulta bastante entendible que la mayoría se siente molesto debido a ese despliegue de seguridad el cual está llevándose a cabo en la morada de los Trump.
Sin embargo, no todo es una mala noticia para Melania. Partiendo de allí, y debido a la intervención de los abogados el cual contrató al instante, los compatriotas no podrán manipular la imagen de ella con fines promocionales. Y es que diferentes firmas eslovenas (en el país de origen) ya estaban haciendo uso del rostro de su habitante más popular con el fin de vender varias cosas tan peregrinas como la miel y otras cosas.
De esta forma, no sólo no pueden usar la imagen, sino que tampoco el nombre o el apellido para ese fin, tal como se supo hace días. Melania Trump se transformó en un reclamo publicitario empleada en diversas formas, bien sea pasteles, lencería, zapatos e inclusive un árbol de Navidad que se encuentra en la capital de Eslovenia, Ljublana.
