Michael Jackson fue un icono musical. Desde pequeño su fama y sus controversias lo hicieron blanco de críticas, elogios, y un sinfín de motivos para que hoy en día aún sea recordado.
Michael como excelente padre de familia.
Su gran pasión por los niños lo llevo a hacer muchas cosas: desde construir parques de diversiones hasta… enfrentar demandas por abuso sexual. Sin necesidad de una madre, con sólo alquilar el vientre de una enfermera, logró crear una familia a la cual casi no conocimos, debido a que vivían encerrados en una burbuja para evitar el contacto con el mundo exterior.
El fruto de su última inseminación artificial fue exhibido desde un peligroso balcón como si se tratase de un trofeo.
Michael Jackson excelente negociante
Hizo muchísimo dinero. Como negro, como blanco. Con y sin Tommy Mottola. Pero, sobre todo, como propietario de los derechos de las canciones de los Beatles. Su registradora suena cada vez que se vende un disco de los Beatles, alguien interpreta uno de sus temas o uno de sus abogados negocia una canción para la publicidad de un detergente.
Bueno Paul y Yoko habrían hecho lo mismo. Con la única diferencia de que el dinero no habría quedado (enteramente) en manos de los cirujanos.
Como excelente ¿Ser humano?
Podrá ser el perfecto blanco de las críticas, pero Michael Jackson por lo menos tuvo el coraje de cambiarse de color para demostrarle al mundo que todos somos iguales. Que no existen diferencias entre negros y blancos… y bueno, gracias a él, tampoco entre humanos y extraterrestres.
Especialmente después de cuarenta cirugías y tratamientos de despigmentación. Hasta donde se sabe, los blancos que han querido ser negros sólo se han atrevido a aumentar el tamaño de sus miembros viriles, cosa que hasta el mismo Michael tuvo que sacrificar.