Diana de Gales princesa del pueblo

Diana de Gales
Diana de Gales

Diana de Gales. Los acontecimientos de la realeza y la nobleza han estimulado siempre una curiosidad que diversos medios de comunicación. Es una historia considerada insólita por la enorme fama y afecto que disfrutó la princesa Diana de Gales. Título que recibió tras su enlace en mil novecientos ochenta y uno con el príncipe Carlos de Inglaterra, heredero de la reina Isabel II y beneficiario de la corona británica.

Posterior a su inicio apacibles, el matrimonio hizo aguas entre un montón de desencuentros. Inculpaciones de adulterios considerablemente conocidas por la prensa sensacionalista. La opinión pública conservó e inclusive agrandó su cariño hacia la “princesa del pueblo” y denigró la conducta del príncipe Carlos.

Un año después de realizarse legalmente el divorcio (mil novecientos noventa y siete), Diana murió en un suceso automovilístico. Donde los paparazzi a sueldo de la farándula tuvieron su parte de responsabilidad. La tragedia perturbó al mundo, engrandeció hasta el fetichismo la figura de la princesa Diana de Gales y sumergió a la monarquía británica en un demérito del que tardaría en recuperarse.

Diana de Gales se relacionó con Dodi Al-Fayed millonario de origen egipcio.

La noche del treinta y treinta y uno de agosto del noventa y siete ambos perdieron la vida en un aparatoso accidente de automóvil. Cuando intentaban evadir a los paparazzi y transitaban a gran velocidad por el túnel del puente del Almá en París.

Al-Fayed murió con el impacto. La princesa de Gales fue trasladada al Hospital de la Pitié-Salpêtrière, donde expiró horas después. La casa real británica, permitió y celebró en su honor un soberbio funeral en Westminster.

La vida de Diana de Gales, durante su matrimonio como después de su separación, fue argumento repetido de la prensa rosa. Y de la farándulas escandalosas y centro incesante de atención.

Todas sus presentaciones en público recibieron un trato especial por parte de los medios de comunicación internacionales. Su popularidad terminó siendo recíprocamente proporcional a la de su marido. Fue considerada una madre virtuosa, y tras su muerte hubo inclusive propuestas de beatificación que, en conclusión, estuvieron excluidas.